Base textual:
Entonces me fue dada una caña semejante a una vara de medir, y se me dijo: Levántate, y mide el templo de Dios, y el altar, y a los que adoran en él.
Apocalipsis 11:1
¿Qué tan alto llega tu adoración?
El apóstol Juan recibe una orden de proceder a medir el templo, para lo que le fue suministrada una vara semejante a una caña de medir; También debía medir el altar y los adoradores, en está parte en especial quiero centrarme y tomarlo a manera literal, ¿Qué medida tiene tu adoración?.
Lo que se puede deducir de este texto no es que el señor este mirando las medidas físicas de los adoradores, recordemos que: Y Jehová respondió a Samuel: "No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón. 1. Samuel 16:7.
Pero si el señor no está pidiendo la medida literal de los adoradores, entonces que está midiendo el señor en este caso... mide la adoración de los adoradores, el carácter de los adoradores.
Dios evalúa la adoración que los adoradores le brindan.
El señor determina si la adoración ofrecida está a la medida, a la altura de sus requisitos y aún más si los adoradores mismos están a la altura de dichos requisitos.
El verbo utilizado allí para "medir" es el griego metreo, que es usado once veces en el NT utilizado con el significado de medir un objeto de manera literal o bien en sentido figurado para evaluar o juzgar.
Etimología: Adorar= ad que significa "hacia"; orare que significa "orar"
La definición secular dice lo siguiente: Adoración = reverenciar o rendir culto a un ser que se considera de naturaleza divina.
Lo que dice la palabra de Dios de lo que es la adoración.
La primera vez que se nombra la palabra adoración en la biblia está en Genesis 22:5 Entonces dijo Abraham a sus siervos: Esperad aquí con el asno, y yo y el muchacho iremos hasta allí y adoraremos, y volveremos a vosotros.
La primera de las características de la adoración hacía Dios se puede denotar allí, Abraham iba a adorar a su Dios, y de que manera lo hacía, pues estaba obedeciendo al mandato de Dios, esto quiere decir que un verdadero adorador obedece a la palabra de Dios, cumple con la voluntad de Dios.
Por lo tanto la adoración es la actitud interna del corazón del hombre para Dios, entendiéndose como siervo, en un acto de rendición voluntaria por amor al señor.
Dios es el único merecedor de toda la adoración: No tendrás dioses ajenos delante de mí, no te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás, porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padre sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen. Éxodo 20:3-5.
Tenemos un Dios que es celoso de lo que le pertenece, por lo tanto aborrece la idolatría, la fornicación que es la entrega de honra y gloria a las criaturas antes que al creador, por eso un adorador sabe y practica la adoración exclusiva al único ser que lo merece quien es Jehová.
Adorar implica ofrecer lo mejor, lo más valioso y grandioso que se pueda poseer: Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra. Mateo 2:11
En esté pasaje podemos evidenciar que la adoración es un acto de reverencia, un acto de respeto por lo que los magos se arrodillaron postrándose a los pies de Jesús, lo que indica que la manera en la que nos comportamos también denota adoración y sumisión frente a quien nos encontramos.
Además en este pasaje se nos indica que le adoraron trayendo tesoros a Jesús como lo es el oro, incienso y mirra.
El oro en el nuevo testamento está ligado a las obras realizadas con suma entrega, calidad y sacrificio como servicio a Dios.
En la primer carta a los Corintios se le coloca en primer lugar como la realización de las obras más excelsas: Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca. 1. Corintios 3:12.
Un adorador sabe como brindar una adoración a la altura de su Dios, dando como resultado una vida llena de actuaciones, comportamientos y obras que son como el oro al servicio de Dios.
El incienso simboliza las alabanzas, la exaltación que nace del corazón del adorador para llenar de elogios, de palabras de amor, de palabras de agradecimiento al señor. Suba mi oración delante de ti como el incienso, el don de mis manos como la ofrenda de la tarde. Salmos 141:2
Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del cordero; todos tenían arpas, y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos. Apocalipsis 8:5.
Un adorador tiene relación estrecha y directa con Dios, se mantiene comunicado todo el tiempo con él, expresa palabras de exaltación, de reconocimiento y de admiración para con su salvador.
Dios es espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren. Juan 5:24